Altruismo: la esencia del verdadero voluntariado

Autor: Lucia Helena Galvão

publicado el 05-12-2025

Cuando hablamos de voluntariado, muchos imaginan solo acciones sociales, donaciones o trabajo comunitario. Todo esto es valioso, pero hay una dimensión aún más profunda: el voluntariado como expresión del altruismo, como herramienta para transformar al ser humano y, en consecuencia, a la sociedad. No se trata solo de remediar las consecuencias de los problemas, sino de actuar sobre sus causas, cultivando valores que nos hacen mejores y más humanos.

Visita residencia ancianos Creta

Visita de voluntarios de Nueva Acrópolis a una residencia de ancianos en Rethymno-Creta, Grecia.

El altruismo no es sentir lástima por el otro: es percibir al otro como parte de nosotros mismos. Es ampliar nuestra identidad para incluir al prójimo, entendiendo que cuidar de los demás es cuidar de nosotros mismos. Esta percepción es sofisticada y no puede ser impuesta; nace de una conciencia en evolución. Cuando entendemos que la vida es una gran unidad, que la separatividad es una ilusión, comenzamos a dar pasos hacia la verdadera felicidad.

El egoísmo, por el contrario, nos une a pequeños y fugaces intereses: acumular bienes, buscar la fama, ganar estatus. Pero basta mirar alrededor para percibir que eso no trae plenitud. ¿Cuántos tienen todo esto y permanecen vacíos? La vida no se justifica por la comodidad o el placer, sino por el crecimiento. Cada dificultad es un paso que nos eleva. Escapar de todo lo que molesta es elegir el estancamiento. Crecer es enfrentar, aprender y transformar.

Detrás de todas las diferencias, somos uno. Esa es la verdad del universo: la unidad. Cuando ayudamos a alguien, no estamos haciendo algo extraordinario; simplemente estamos cumpliendo nuestra naturaleza. El altruismo es una virtud divina porque trabaja para restaurar esa unidad en medio de la multiplicidad. Nos acerca al misterio de la vida, acelera nuestra conciencia y nos hace más humanos.

El voluntariado auténtico no busca aplausos ni gratitud. Está satisfecho en sí mismo. Un hermoso versículo dice: “El mayor premio de los que aman es precisamente estar amando”. Así también es con los que hacen el bien: el acto ya es la recompensa. Un solo gesto desinteresado, hecho sin motivos ulteriores, es suficiente para dar sentido a una vida. Justifica nuestro paso por la Tierra y nos acerca a lo que tenemos de más humano.

Nunca subestimes la fuerza de un ejemplo. Un simple gesto puede cambiar el destino. Como la historia del niño que, incluso hambriento, ofreció su único mango a un hombre de negocios en Brasilia. Este acto de generosidad transformó la vida del hombre, que comenzó a dedicarse al trabajo social. En el pequeño gesto, un gran cambio. Esto es lo que el mundo necesita: referencias vivas, ejemplos que inspiran.

En el Día del Voluntario, reflexiona: ¿qué legado quieres dejar? ¿Qué ejemplo quieres ser? Tal vez no podamos cambiar el mundo entero, pero podemos cambiar el mundo de alguien. Y eso ya es mucho. El voluntariado es más que una acción; es un estado de conciencia. Es la comprensión de que hemos venido al mundo para crecer y sumarnos. Es convertir las dificultades en pasos y hacer de la vida una obra maestra de la humanidad.

Seamos esa luz y ejemplo. Porque el mayor premio de los que practican bien es precisamente estar practicando. Y cuando eso se convierte en la tónica de nuestra vida, comenzamos a escribir historia, una historia que no solo nos magnifica, sino que ilumina el camino para todos los que nos rodean.

Taller de comunicación sobre “No Violencia”, dentro del Programa Crianças para o bem (Niños para el Bien), que promueve Nueva Acrópolis en Brasili y que ya ha asistido a miles de niños, adolescentes y jóvenes.

 

Créditos de las imágenes: Nueva Acrópolis Grecia, Nueva Acrópolis Brasil

Si alguna de las imágenes usadas en este artículo están en violación de un derecho de autor, por favor póngase en contacto con nosotros.

Referencias del artículo

Artículo publicado originalmente en portugués en https://acropole.org.br/artigos/altruismo-a-essencia-do-verdadeiro-voluntariado/

¿Qué opinas?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *