En cierta ocasión preguntaron a María Zambrano, la más importante filósofa española del siglo XX:
A lo que la niña, futura escritora y poeta, contestó: “Una caja de música.”
Pero le dijeron:
– Eso no es posible. ¿Qué quieres ser entonces?
Entonces la filósofa de la luz y los claros del bosque respondió: “¡Centinela!”
– Pero las niñas no pueden ser centinela…
– Pues entonces caballero templario.
Y tras una nueva negativa respondió: “Filósofa.”
Así, contra viento y marea consiguió hacer realidad el último de sus sueños infantiles.
Créditos de las imágenes: Fundación María Zambrano
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