En una ocasión preguntaron a Diógenes por qué la gente daba limosna a los pobres y no a los filósofos, a lo que respondió: «Porque piensan que pueden llegar a ser pobres, pero nunca a ser filósofos.»
Este filósofo solía mendigar, debido a su pobreza. Para ello utilizaba estas palabras: «Si ya has dado a alguien, dame también a mí; si no, empieza conmigo.»
Un día, mientras pedía a un avaro, y como este se demoraba en satisfacerle, le dijo: «Amigo, te pido para mi comida, no para mi entierro.»
El hielo es agua congelada que, en sentido general nos transmite –de manera casi obvia–…
Acceso a revistas digitales de descarga gratuita, promocionadas por la Organización Nueva Acrópolis en Costa…
La generación Z, que ha crecido con los videojuegos y los teléfonos móviles, ha ganado…
El compromiso que he asumido en esta ocasión es el de intentar hablar sobre nuestro…
Existen dos grandes focos de altas culturas donde podemos percibir simbolismos, si bien estos existen…
Una vez preguntaron a Aristóteles: —¿Nunca has mentido tú? El filósofo respondió: —Sabiendo que mentía,…
Ver comentarios
Gran Maestro... .. . .. ... .......
Gracias Diógenes.
Buena lectura